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¿Qué hacer si te ha dado un pinchazo en el gemelo? Causas, soluciones y cómo prevenirlo
El pinchazo en el gemelo es una lesión muy frecuente entre todo tipo de deportistas, tanto profesionales y amateurs, y puede desencadenar en una complicada lesión como la rotura fibrilar. Te contamos cómo prevenirlo y qué tienes que hacer si notas el 'latigazo'.
| 25 Junio 2020
Si estás leyendo esto, probablemente hayas sufrido una de experiencias más extrañas y dolorosas de tu vida: querías completar esa maratón, o llegar a ese balón, o simplemente cumplir el objetivo en tu running diario, y de repente, un dolor punzante en el gemelo te lo impide. Un latigazo difícil de explicar para aquellos que no lo hayan vivido, y que quienes sí lo hayan hecho entenderán a la perfección. En ese mismo instante, surgen muchas preguntas. Vamos a intentar responderlas.
¿Qué hay que hacer justo al sufrir el pinchazo?
Comprueba si ha sido un mal apoyo o realmente el músculo está dañado. Prueba a moverte un poco, y saldrás pronto de dudas. Si todavía las tienes, no fuerces y para. Podría ser una rotura de fibras, y continuar con la actividad solo agravaría la situación y aumentaría las semanas de lesión.
Lo siguiente será, ya tranquilamente en casa, aplicar frío al gemelo para rebajar la inflamación. Como te costará moverte y la hinchazón puede ser importante, no es recomendable acudir a un fisioterapeuta o especialista hasta un mínimo de entre 24 y 48 horas después de la lesión. Más que nada, porque le será difícil hacer un diagnóstico y poder ayudarte.
Una vez cumplas con la fecha marcada, la mano del fisio será fundamental. Tras ello, te tocará pasar una prueba de fuego: movimientos de contracción y estiramientos excéntricos. Si puedes hacerlos e incluso la pierna se relaja, estamos ante una simple contractura que debería curarse sin problemas con unos días de reposo. Si el dolor te lo impide, lo más probable es que haya una rotura fibrilar de grado I, II o III. Cada centímetro de rotura equivale, grosso modo, a una semana de inactividad, así que reza para que sea lo más pequeña posible.
¿Por qué nos ha pasado esto?
Seguramente, tras el susto inicial, nos preguntemos qué hemos hecho mal para terminar lesionados. Las causas de un pinchazo en el gemelo que pueda derivar en una rotura de fibras suelen ser las mismas. La principal es no haber calentado todo lo bien que deberíamos. A partir de ahí, el riesgo que corre el músculo es mucho mayor. Si encima lo sometemos a mayor esfuerzo del permitido, o hacemos cambios de ritmo intensos, el desastre es inevitable.
¿Cómo podemos prevenir el pinchazo en el gemelo o la rotura fibrilar?
Una vez te recuperes, la siguiente duda tendrá que ver con la prevención, con qué hacer para evitar repetir una lesión como esta. Evidentemente, será fundamental calentar bien la musculatura, sobre todo la zona anteriormente dañada. Otro aspecto importante será ir bien equipado, tanto con medias de comprensión como con una talonera deportiva, accesorios que ayudarán al gemelo y al sóleo a sufrir menos.
Lo más visto
Por último, pero no menos importante, mantente hidratado. Es más probable que te toque sufrir una lesión como esta si no tienes las sales suficientes en tu organismo o si no estás bien hidratado, así que ya sabes.
Siguiendo nuestros consejos, conseguirás que tus gemelos no te fallen, o al menos sabrás los pasos que hay que seguir en caso del tan temido pinchazo.