Envato Elements
Las lesiones más comunes de los deportes más practicados
Fútbol, baloncesto, atletismo, escalada... Cada deporte conlleva un riesgo de lesión específico. Repasamos la lesión más común de los deportes más practicados.
16 Septiembre 2021
|Todos sabemos las reglas básicas de los principales deportes y disciplinas deportivas, pero muchos, incluso quienes lo practican, desconocen el riesgo de estas actividades, y qué zonas de nuestro cuerpo pueden verse más fácilmente afectadas en forma de lesión. Ya sea por interés o por simple curiosidad, seguro que os viene bien esta pequeña guía con la lesión más típica o la zona más propensa a sufrir contratiempos de los deportes con más licencias federadas en España, según datos del Anuario de Estadísticas Deportivas.
Fútbol
Es el deporte más conocido, más practicado en todo el mundo y el que mueve más dinero, pero su lesión más repetida es la más simple de todas: el esguince de tobillo. Las carreras, las entradas, los giros y regates, los saltos y caídas de los mismos ponen en serios aprietos al tobillo en cada acción. Un esguince de tobillo ocurre cuando forzamos demasiado un giro o un movimiento. De esta manera forzamos también los ligamentos que hay en la zona para sujetar y dar estabilidad al pie. En función del límite al que los hayamos sometido, un esguince de tobillo también puede acarrear lesiones en los propios ligamentos externo e interno.
En general, hay que tener cuidado con estos esguinces. Si no se tratan o curan bien puede acarrear problemas como artritis, inestabilidad o dolor crónico.
Por último, hay que tener en cuenta que estamos ante un deporte muy explosivo, de movimientos rápidos y bruscos, por lo que casi tan comunes como los esguinces son las roturas musculares.
Baloncesto y balonmano
En el baloncesto y el balonmano la importancia de los brazos y las manos provoca que las luxaciones de hombro y dedos sean lo más habitual. Esto ocurre cuando dos huesos se separan en la zona donde deberían estar juntos, es decir, se separan en la propia articulación. Seguro que os suena el famoso "¡se me ha salido el hombro!". En ese caso, lo que se separa es el húmero. Una lesión así puede ocasionarse por caídas o choques o malos gestos al lanzar el balón.
En el caso de los dedos, sucede en las falanges y su origen puede ser por un choque fuerte con el balón o un golpe fuerte en esta zona. Las luxaciones requieren de inmovilización y reposar para no forzar la articulación.
Lo más visto
Si queremos añadir una lesión mucho más grave que se da con frecuencia en el baloncesto, esa sería la del tendón de Aquiles. Se produce tras obtener una sobrecarga excesiva o degeneración en la zona de este tejido cuando un movimiento empuja con fuerza los dedos de los pies hacía arriba, en cualquier arrancado, impulso o amortiguación tras caída.
Voleibol
El volley es un deporte muy activo y completo en el que hay que destacar la capacidad de salto que tienen que tener sus jugadores y jugadoras. Es por ello que, aunque proliferan las lesiones de las extremidades superiores, sobre todo en el hombro, son las rodillas las más dañadas. Las lesiones crónicas en este deporte son especialmente frecuentes, entre ellas la condromalacia o condropatía rotuliana. ¿Qué es eso? Simplemente, la aparición de erosiones en el cartílago rotuliano, generando el desgaste del mismo. Por mencionar algo de la zona superior, también los dedos tienen mucho peso por los movimientos característicos de este deporte. Es probable sufrir artritis o artrosis en los dedos por los numerosos golpes y, en especial, porque se doblan en muchas ocasiones. Este es el motivo de ponerse esparadrapo en los dedos al practicar voleibol.
Atletismo
En el caso de los corredores o runners, las lesiones son bastante distintas porque se mueven más en el terreno de músculos, fibras y tendones. Aun así, de nuevo son las rodillas la zona que más sufre, al estar continuamente corriendo o saltando. No habrá atleta que no haya tenido en su bagaje una tendinitis rotuliana, que consiste en una inflamación del tendón de la rótula por sobreesfuerzo.
Por otra parte, el hecho de ejercitar tanto los músculos puede llevar a una rotura fibrilar, que como su propio nombre indica sucede cuando se rompe toda o una pequeña parte de las fibras que componen los músculos.
Tenis y pádel
Cierto es que el tenis no es un deporte de contacto, pero eso no quita que tenga sus riesgos. ¡Si hasta tienen una lesión llamada 'codo de tenista'! Era de esperar que fuera la más top, también denominada epicondilitis lateral, pero eso se lo dejamos a los profesionales mejor. Tiene que ver con la sobrecarga de los tendones del codo. Para evitar esta lesión es importante un bien dominio del propio deporte para evitar la inflamación. El codo de tenista desaparece con reposo, pero ojo, es recomendable acudir a un especialista como apoyo por si se puede mejorar de algún modo. En estos deportes es común también oír la palabra SLAP, lesión parecida a la condromalacia, pero en el hombro. Con el SLAP, el labrum, un fibrocartílago en el hombro, se rompe, provocando dolor, inestabilidad o rigidez y chasquidos en la articulación.
Golf
En el golf, la espalda sufre horrores. El movimiento de rotación de la espalda provoca lumbalgia, dolor en la parte inferior de la espalda. Si hay algún jugador de golf leyendo esto, un consejo: cuidar mucho vuestra higiene postural para no agravar este tipo de lesión. Al lumbago se podría sumar la tendinopatía del manguito rotador, localizada en la parte superior del brazo. Los manguitos rotadores, músculos cuya función es estabilizar los hombros, son los que salen malparados en este caso cuando se contrae demasiado la musculatura.
Escalada/montaña
La escalada exige mucho a todo tu cuerpo, así que lo más fácil es que sufras tendinitis en cualquier parte, con inflamación, dolor y movilidad reducida de la zona afectada. De entre todas las tendinitis asociadas a este mundillo, destacamos la de bíceps. Está localizado en la parte superior del brazo y normalmente asociado con problemas de hombro. Ten cuidado.