Shutterstock
¿Cuáles son los huesos más importantes del cuerpo humano?
El deporte no sólo afecta a nuestros músculos, también a nuestros huesos. Por eso, es fundamental que sepas bien cómo funcionan y cómo debes cuidarlos si realizas entrenamiento habitual en el gimnasio o practicas deportes.
| 24 Septiembre 2018
Los huesos son órganos rígidos que sostienen el cuerpo, protegen órganos vitales y que, junto con músculos y articulaciones, permiten los movimientos. El cuerpo humano tiene un total de 206 huesos, que suponen alrededor del 12% de su peso. Descubre con MENzig.fit por qué los huesos son tan importantes y cómo afecta la práctica de deporte al cuidado de tu tejido óseo.
Qué son los huesos y qué funciones tienen
Los huesos del cuerpo humano son órganos vivos en constante proceso de remodelación. A medida que crecemos van aumentando su tamaño y, cuando uno de ellos se rompe, es capaz de autoregenerarse hasta sellar la fractura.
Su principal componente es el tejido óseo, que se forma, a su vez, de un 2% de células y un 98% de matriz extracelular, rica en calcio, fósforo y colágeno.
Los huesos del cuerpo humano tienen tres tipos de funciones:
- Mecánicas. Sostienen el cuerpo, permiten el movimiento y la audición, y protegen órganos vitales, como el cerebro en el caso del cráneo o el corazón y los pulmones en el de la caja torácica.
- Hematopoyesis. La médula ósea roja, que produce los glóbulos rojos, se encuentra en el tejido esponjoso de los huesos de gran tamaño como el fémur.
- Metabólicas. Los huesos almacenan ácidos grasos y suponen la principal reserva de calcio y fósforo del organismo.
El cuerpo humano de un adulto se compone de 206 huesos y 350 articulaciones. Cuando nacemos, sin embargo, el número de huesos es mayor, de aproximadamente 270, debido a la posición que el bebé adopta en el útero materno.
Lo más visto
Algunos de los huesos que se fusionan a medida que el bebé crece son el cráneo, el sacro y los huesos de la cadera.
Los huesos más importantes del cuerpo humano
Los huesos se encuentran divididos en el cráneo, el tórax, las extremidades superiores y las inferiores. Cada uno de los 206 huesos de un adulto tiene una función específica que lo hace imprescindible para que nuestro cuerpo funcione de manera correcta. Sin embargo, hay algunos más importantes que otros:
- Los 28 huesos que forman el cráneo, que protegen el cerebro, el cerebelo y el bulbo raquídeo.
- Las 26 vértebras, que conforman la columna y sostienen el cuerpo.
- El esternón y 24 costillas, que, junto con la columna a la altura del tórax, componen la caja torácica para proteger corazón, pulmones y otros órganos.
- Húmero, cúbito y radio en el brazo.
- Fémur, tibia y peroné en la pierna.
Es importante mantener los huesos sanos y fuertes para disfrutar de una buena calidad de vida.
Aprende a cuidar el esqueleto
Los huesos son un órgano vivo en continuo proceso de remodelación. Los expertos creen que el esqueleto se renueva por completo cada 10 años. Pero para eso necesitan calcio y fósforo, minerales que el cuerpo humano no puede producir por sí solo y que debemos buscar en la ingesta de alimentos.
Calcio para unos huesos más fuertes
La cantidad de calcio y otros minerales presente en una sección de hueso se llama densidad ósea y disminuye con la edad a partir, más o menos, de los 35 años. Menos densidad ósea implica huesos más frágiles propensos a fracturas, incluso sin caídas.
Para que nuestros huesos sigan fuertes cuando envejecemos, los expertos recomiendan tomar al menos 1.200 miligramos de calcio al día, acompañados de entre 800 y 1.000 unidades internacionales de vitamina D, que facilita la absorción del calcio en el estómago. Consulta antes con su médico para comprobar si esas cantidades son las adecuadas en tu caso.
Alimentos ricos en calcio son, por ejemplo:
- Lácteos como la leche, el queso y el yogur.
- Hortalizas de hojas verdes como la berza, el brócoli o las espinacas.
- Salmón y sardinas.
- Almendras.
Lo más nuevo
Ejercicios para no perder densidad ósea
El ejercicio físico también contribuye a mantener la densidad ósea. Realizar actividad física con frecuencia, aunque sólo se trate de caminar, tiene un efecto positivo a largo plazo sobre la fortaleza de nuestros huesos.
Por otra parte, los entrenamientos que se centran en una zona determinada del cuerpo tonifican los huesos de ese área. Así, un jugador de tenis que saca siempre con el mismo brazo tiene los huesos de ese brazo más fuertes que los del contrario, mientras que en un futbolista son las piernas la zona más robusta del esqueleto.
Para mejorar la salud general de todos los huesos, las actividades físicas más recomendables son aquellas que suponen sostener nuestro propio peso, como caminar, correr, levantar pesas o hacer yoga.
No obstante, si tu densidad ósea ya es baja o has sufrido una fractura en el pasado, consulta con un especialista para que te indique cuál es el tratamiento más seguro. Si un hueso es frágil y realizamos un ejercicio de alto impacto, se puede romper.
Algunos de los deportes con más riesgo de fractura ósea son el fútbol, el baloncesto, el ciclismo, el esquí o el crossfit.
Infórmate con MENzig.fit de las rutinas de entrenamiento y los hábitos de alimentación más aconsejables para cuidar la salud de los huesos del cuerpo humano.