Hash House Harriers
Hash Run, el deporte en el que se combinan nuestras dos pasiones: la cerveza y el running
Una carrera por el monte hasta encontrar el punto de encuentro para beber cerveza. El Hash Run es el deporte de tus sueños, y tiene más historia y adeptos (incluido un club madrileño) de los que podrías imaginar.
06 Julio 2020
|Todos necesitamos una motivación extra a la hora de hacer deporte, ya sea entrenar, correr o jugar al fútbol. Para los más profesionales, la motivación la encuentran en la mejora de su capacidad física, su resistencia o en el puro hecho de sentirse vivo. Para la mayoría, la motivación está en la cerveza de después.
Solo hay que fijarse en las terrazas de los bares los domingos al mediodía. La mitad están ocupadas por runners o equipos de fútbol que buscan refrescarse y celebrar su triunfo o decepción con una cerveza en la mano. Comentar la carrera o el partido de esa mañana con la mágica mezcla de levadura, lúpulo, agua y cebada en el cuerpo es un placer irresistible.
Si eres de los que consideran el running o el footing y la cerveza como sus grandes pasiones, hoy te traemos el deporte que te cambiará la vida, y que muchos como tú practican en las principales ciudades del mundo: el Hash Run.
Qué es el Hash Run
El Hash Run o Hashing es un deporte casi centenario (como veremos más adelante) en el que un grupo de corredores deben alcanzar una serie de puntos de control hasta llegar a la meta. En cada uno de esos puntos, los participantes se reunirán para tomar una cerveza antes de proseguir la ruta, aunque también hay alternativas si no te gusta la cerveza. Como podéis imaginar, al terminar el recorrido los corredores vuelven a juntarse cerveza en mano y cantando una canción, dando por finalizada la etapa.
Reglas del Hash Run
Parece una actividad sencilla, pero tiene una serie de instrucciones que hay que cumplir a la perfección. El deporte se divide entre 'hares' (liebres) y 'hashers' o 'harriers', los corredores. Las liebres son las que organizan la actividad de ese día: eligen el trayecto, suelen ser quienes compran lo que haga falta (conocido como el 'beermeister') y señalizan la ruta para los participantes mediante tiza o trozos de papel, que representarían la esencia u olor del animal. La dificultad añadida es que algunas de estas pistas pueden ser falsas para despistarte y que tardes más en acercarte a los puntos de encuentro.
Si has caído en su trampa, debes informar al resto de corredores para que no les suceda lo mismo. En el Hash Run, la competitividad por ser el primero importa menos que el ayudarse unos a otros a superar las pruebas de las liebres, aunque todo depende del grupo en el que participes. El término empleado para informar de que el camino que estás siguiendo es el erróneo es 'check back'. Si por el contrario, has ido por el lado correcto, debes gritar '¡On, on!' al resto. Si todavía lo estás comprobando, lo notificas diciendo 'checking'.
Lo más visto
Las competiciones suelen ser de 4 a 10 kilómetros, con las subidas y bajadas propias de un terreno más montañoso, aunque los grupos profesionales pueden hacer un trayecto incluso más largo. Esta mezcla entre gymkana y footing que es el Hash Run termina haciéndote sudar de lo lindo, lo que hace que la cerveza de los puntos de control y del final sea más apetecible. Cuando lo estés pasando mal en pleno recorrido, pensar en lo que te espera seguro que ayuda.
La última tradición la encontramos tras superar la línea de meta, donde todos los corredores se juntan para el último refrigerio y entonan juntos la canción por excelencia de este deporte: 'Swing Low, Sweet Chariot'.
Origen del Hash Run
El Hash Run está basado en el histórico Paper Chase, que bebe a su vez de los tradicionales juegos de estrategia de la liebre y los perros de cazadores, muy populares en el norte de Europa durante la Edad Media. El antecedente directo del Hash Run, el británico Paper Chase que aparecía en 'Hamlet', se aprendía en las escuelas de caballería durante la Edad Moderna y Contemporánea para la caza del zorro.
En 1938, cuatro oficiales británicos destinados a Singapur deciden reunirse cada lunes para jugar a una variación del Paper Chase con un objetivo muy diferente: recuperarse de la resaca del fin de semana. De esta manera tan icónica es como nace el Hash Run. Poco después, Japón prohíbe esta práctica tras invadir Singapur, aunque se retoma tras la IIGM. Sin embargo, no sería hasta la década de los 60 y 70 cuando el Hash Run se convirtiera en un fenómeno internacional. Porque sí, amigos, tal y como vais a comprobar a continuación, son miles de personas de todo el mundo las que practican rutinariamente el Hash Run.
Hash House Harriers, la organización encargada del Hash Run y creada por un español
Como decíamos, el Hash Run fue creado en 1938 por cuatro oficiales británicos. Uno de ellos, Alberto Esteban Ignacio Gispert, nació en Kent (Inglaterra), pero sus padres eran de Barcelona. Fue él quien lideraba el grupo originario de 'hashers' y quien decidió patentar la organización que habían formado bajo el nombre de Hash House Harriers (HHH). En la actualidad, el nombre se mantiene globalmente mediante una estructura descentralizada, con los HHH de cada país (unos 2.000 en total) en contacto permanente para establecer las reglas y hacer competiciones a gran escala. Todos tienen un lema en común que define bien la particularidad de este deporte: "el club de bebedores con un problema de adicción al running".
Uno de los más importantes en Europa es el Hash House Harriers Madrid, más conocido como MH3. Fue fundado el 28 de mayo de 1984 y cuentan con más de 2.300 carreras a sus espaldas en las que se juntan unas 50 personas cada domingo. El Hash Run es también popular en la Comunidad Valenciana y Asturias, región donde se celebra una competición nacional cada año. Es muy fácil entrar en uno de los HHH, donde te recibirán con los brazos abiertos, por lo que no tardarás en sentirte uno más y formar parte de la familia.
Si tienes pensado empezar a salir a correr pero todavía no habías encontrado la motivación para ello, ahora ya no tienes excusas. Te esperan varias cervezas en el camino.