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Running: cómo prevenir las lesiones, qué lesiones puedo sufrir y qué hacer para curarlas
El miedo a tener lesiones es uno de los motivos que más nos echan para atrás a la hora de querer practicar algún deporte. La prevención de estos contratiempos es importante para dar ese paso adelante. Por eso, te damos algunos consejos para evitar tener que ir al hospital.
| 21 Mayo 2019
Una de las cosas más molestas del mundo del deporte es sufrir una lesión. Y no hablamos de deportistas de élite, sino de las que se producen en los inicios. La prevención es uno de los puntos más importantes a la hora de empezar la actividad, pero muy pocos lo llevan a cabo por su desconocimiento.
En este caso, a la hora de hacer 'running' es muy común poder sufrir lesiones en las piernas (tobillos, gemelos...) ya que son las partes que soportan todo el peso del cuerpo y realizan gran parte de la acción. Todo esto se magnifica en los principiantes. En primer lugar, vamos con algunos consejos para intentar evitar lesiones.
Qué hacer para prevenir las lesiones
Uno de las medidas principales para evitar todas estas lesiones es la adaptación a la nueva rutina deportiva. Como mencionamos en el artículo donde te contamos algunos consejos para empezar a ir al gimnasio, es necesario un periodo en el que no hagamos esfuerzos que no están a nuestro alcance. Hay que comenzar poco a poco para que todas las partes implicadas se adapten a los nuevos movimientos y esfuerzos que estamos realizando.
Además, durante el inicio, nuestro cuerpo hace este proceso sobrecargando nuestros músculos y extremidades. Por esto es mucho más importante de lo que creemos realizar estiramientos a la hora de terminar los ejercicios.
Otro de los consejos para evitar el calvario de las lesiones es parar de hacer ejercicio. Muchas veces un principiante que siente un dolor puede pensar que es precisamente por ese periodo de adaptación que provocan sobrecargas y/o agujetas, pero pueden ser el inicio de una lesión. Por esto es importante parar un par de días hasta que esa molestia ceda. La adaptación requiere tiempo.
A pesar de todo, hay veces que se hacen las cosas bien, y no puede evitarse tener que hacer un parón porque hemos caído en alguna lesión. Es hora de pasar al siguiente apartado.
Lo más visto
Cuáles son las lesiones más comunes
Tirón muscular
Este tipo de lesión quizá sea la que se da con una mayor frecuencia, y también es una de las menos peligrosas. Se trata de un leve desgarro en el músculo de la zona que se ha visto afectada (gemelo, cuádriceps, bíceps femoral...). Generalmente está causada por falta de calentamiento o por forzar movimientos.
Para hacer que pase el mal trago, lo que hay que hacer es parar de hacer ejercicio e intentar masajear la zona o poner algo frío, y estar en reposo.
Esguinces
Otra de las más comunes especialmente entre corredores. En resumidas cuentas, los esguinces son movimientos bruscos en los que doblamos el tobillo, y esto provoca un estiramiento o un desgarro de los ligamentos. Afortunadamente, no suelen ser graves, por lo que puede curarse a base de reposo, hielo, comprensión y elevación de la zona afectada.
Tendinitis
De entre todos los tipos de tendinitis, destaca especialmente la 'tendinitis aquilea'. Esta se produce de forma común. Es una inflamación del tendón de Aquiles, que une los músculos del talón hacia la rodilla. Su detonante se da debido a la fuerza que se hace en el impulso de la carrera.
Desgarros
Esta lesión deriva del tirón muscular mencionado anteriormente. Es una lesión mucho más grave, ya que el músculo puede desgarrarse casi en su totalidad. Para recuperarse de esta lesión, es necesario guardar muchos días en reposo, además de una prótesis para inmovilizar la zona y favorecer así la recuperación.
Si fuerzas, la consecuencia más probable sería la rotura total del músculo, y una operación que sería inevitable.
Rotura de ligamentos
Seguimos con lesiones graves. La rotura de ligamentos se da especialmente en las rodillas y es más común de lo que parece. Su causa principal se debe a un sobre esfuerzo de estas articulaciones. Normalmente es necesaria una intervención quirúrgica para sanarlo por completo, aunque depende de cada caso, ya que también puede resolverse sin tener que pasar por quirófano.
Una vez que hemos profundizado en los tipos de lesiones más comunes, es momento de conocer qué podemos hacer para remediarlas.
Qué hacer si sufrimos alguna lesión
Cuando esto sucede, los dolores suelen ser más intensos. En este caso, lo primero que hay que hacer es reposar, aplicar frío y tomar algún analgésico siempre que sea necesario. Si los dolores no ceden, hay que dejar los remedios caseros para otro momento. Visita un especialista para poder recuperarte. Hay veces que no hay consejos milagrosos.